La relación entre Alemania y Estados Unidos se vuelve cada día más distante, tal como se exhibió en la pasada cumbre del G20 pese a los esfuerzos de la canciller Angela Merkel y Donald Trump de enviar un mensaje de cordialidad y respeto.

Este martes, el ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, reiteró que los países de la Unión Europea (UE) no se dejarán intimidar por las amenazas de Washington, ni por las medidas unilaterales como la imposición de aranceles.

El posicionamiento del alto funcionario de Alemania tiene lugar en medio de la reciente advertencia de Estados Unidos, que evalúa la posibilidad de fijar impuestos a la importación de autos, camiones y piezas de automóviles, una de las industrias más importantes para la economía germana.